Como ocurrió días atrás con las monedas con errores de impresión, ahora estalló la movida de los billetes, salvo que en estos casos los defectos son casi imperceptibles, sobre todo los de mil pesos. ¿Qué hay que buscar?
Hace algunos días atrás, explotó la búsqueda de monedas con errores de impresión, que se llegaban a comercializar en internet hasta en 15 mil pesos. Ahora es el turno de los billetes defectuosos, que son material de búsqueda de los coleccionistas, que se reúnen en grupos de Facebook. Aunque en estos casos, los errores de impresión son más difíciles de encontrar y hay que agudizar bastante la mirada. El premio puede ser importante: hasta 20 mil pesos.
La semana pasada, se instaló que las monedas con errores poco frecuentes -por ejemplo, la palabra provingia en vez de provincia- son objetos codiciados por estos coleccionistas que se reúnen en grupo como “Numismática Argentina”. Allí comparten datos para la compra, venta, intercambio y subastas de monedas y billetes nacionales.
Según publica Infobae este martes, entre los billetes los más valorados son los que tienen algún tipo de error de impresión o de ortografía. Aunque aclaran que para saber su valor real hay que encontrar algún comprador interesado o dispuesto a pagar más por ese billete.
Uno de los más buscados, es el billete de $1.000 de la serie de animales, que en su reverso no tienen completo el dibujo. En esos papeles solo se ve el fondo sin terminar y falta el mapa de la Argentina en color rojo y el árbol con el nido del hornero en color violeta.
En Mercado Libre venden otro billete de $1.000 por 20.000 pesos. ¿Por qué? Porque no tiene impresa su banda de seguridad. Se trata de un error de acuñación importante: este hilo impreso en líneas intercaladas en tonos tornasolados y un diseño especial es uno de los principales elementos de seguridad del billete porque es muy difícil de falsificar.
“El precio del billete es un poco alto pero no es irracional. Son 100 dólares. Diría es que es su precio máximo”, explicó a Infobae Ariel Dabbah, miembro titular del Instituto Federal de Investigadores Numismáticos (Ifinra).
Otra pieza buscada es un billete de $200, también de la serie de animales, que en su frente no tiene impreso el numero 200 ni las palabras “doscientos pesos” que en el billete habitual se leen en una tinta de color verde que cambia al dorado (conocida como tinta de variabilidad óptica).
Otro caso es el billete de $200 que tampoco tiene terminado el dibujo de su reverso. En ese billete, también falta el mapa y gran parte del dibujo que en los billetes correctamente impresos tiene colores rosas sobre un fondo celeste.
Los especialistas distinguen entre “error”, aquella moneda que por problemas en su proceso de materialización no debió sortear los controles de calidad y “variante”, que son las piezas de calidad y apariencia correctas pero que difieren del diseño original por variaciones en su etapa de diseño, apertura y multiplicación de cuños, entre otros motivos.
¿Cuánto se puede obtener por la venta de estos billetes? Las personas que integran los grupos de Facebook aseguran que “depende de encontrar un coleccionista interesado y llegar a un acuerdo”. Pero aclaran que el precio puede ser muy jugoso frente a estas rarezas.
La semana pasada, estalló la información de las monedas de 1 peso argentino acuñadas en Inglaterra en 1995 con un error en su reverso, donde dice “Provingias” del Río de La Plata, en lugar de “Provincias”. Aunque se ofrecen a un precio de hasta $50.000 o superior, esas monedas no tienen demasiado valor. Luego aclararon que hay más de 56 millones de unidades que fueron acuñadas con la falta ortográfica.
“Las monedas que dicen provingias no valen mucho, se encuentran muy fácil. Pero las publicaciones son libres y por eso aparecen estos precios. Una moneda de estas puede valer 100 pesos o menos. Nadie las compra porque se consiguen fácilmente en la calle. Todos los coleccionistas las tienen y no hay un público que las demande”, aseguró Dabbah.