Ocurrió el sábado y obligó a la cooperativa a acelerar procesos: será reemplazado por bombas automáticas. Las imágenes de la rotura se viralizaron.
El tanque de agua de la cooperativa de Armstrong sufrió una fisura que dejó escapar gran cantidad de líquido y ya pasa a ser historia. El episodio quedó registrado en imágenes y videos que se viralizaron, y dejaban ver cómo de la gran grieta fluía una enorme cantidad de agua.
Si bien el servicio se restableció, obligó a la empresa proveedora a acelerar los tiempos y adelantar un proyecto que tenía previsto para el año próximo: instalar bombas de inyección automatizadas que regulen la presión de acuerdo a la demanda. Por ahora, el problema se está resolviendo provisoriamente con bombas manuales, que imponen mucho más trabajo ya que hay que encenderlas y apagarlas de acuerdo al suministro.
La estructura, de 24 metros de altura y con capacidad para 500 toneladas, se levanta en el cruce de las calles Sanguinetti y La Plata, donde funciona el predio de la Cooperativa de Provisión de Obras y Servicios Públicos Limitada de esa localidad, ubicada a 94 kilómetros al oeste de Rosario. Y es todo un ícono para la ciudad. Por eso, la empresa no la va a demoler, aunque ya adelantó que dejará de hacerla funcionar. Resulta tan oneroso repararla que ya directamente proyectan un plan de inversiones para reemplazarla por bombas.
La rotura obligó a personal de la entidad a realizar lo que se llama un by pass, consistente en vaciar el tanque y bombear desde las cisternas ubicadas al ras del piso. Se trata de un procedimiento que se utiliza periódicamente cuando hay que limpiar el tanque.
Muchos creen que el enorme hongo de cemento fue sometido a una reparación, pero no es así. El gerente general de la compañía, Ricardo Airasca, explicó que el vaciamiento es definitivo. “Las reservas de agua están en cisternas al ras del suelo, y son elevadas al tanque, que sirve para generar presión. Pero este sistema ya es obsoleto, ahora se trabaja con bombas automáticas que van regulando la presión de bombeo a medida que crece o disminuye la demanda. Y eso es lo que vamos a instalar. Tuvimos que adelantar los tiempos porque era un proyecto para el año próximo, dentro del plan de mejoras que anualmente debemos presentar ante las autoridades regulatorias. Pero arreglar el tanque podría salirnos más de 40 mil dólares, cuando las nuevas instalaciones nos estarían significando una erogación de 60 mil (unidades de la misma moneda). No tiene sentido reparar algo que ya teníamos pensado sacar de circulación en unos meses más”, explicó el ingeniero a La Capital.
La cooperativa brinda servicios de agua potable, telefonía, energía eléctrica, ambulancias y sepelios, internet y provisión de gas natural por redes. El tanque de agua fue instalado en 1974, década en la que se levantaron estructuras de este tipo en distintas localidades de la provincia, pero que fueron quedando en desuso.
Solución provisoria
“No es que el tema esté solucionado. Hicimos un by pass, que se pone en marcha normalmente para distintas tareas: en vez de subir el agua al tanque, se inyecta directamente a la red desde las cisternas con bombas”, afirmó Airasca.
Pero las bombas actuales son manuales, no tienen el sistema electrónico de regulación que poseen dispositivos de última generación. “En estos momentos, hay dos empresas trabajando en un nuevo proyecto para modernizar definitivamente el sistema. Lo que sí sabemos es que el tanque quedará para la postal”, advirtió el directivo.
Aclaró también que en la actualidad no se hacen más tanques elevados, la electrónica ha permitido que las bombas regulen la presión e inyecten el agua necesaria a la red. “Nosotros estamos en un plan de mejoras, pero esta rotura no nos dio tiempo para esperar. Ahora tenemos que poner bombas de velocidad variable que reemplacen al tanque”, dijo. Y abundó: “Este desperfecto aceleró la inversión que íbamos a hacer el año que viene. El tanque sin carga no tiene peligro, cargado tiene 500 toneladas de agua. Pero quedará ahí, porque la gente no quiere que demolamos algo que es ya parte de la imagen tradicional de la ciudad”.
Bombeo manual
Así las cosas, y mientras avanzan los proyectos, se bombea con aparatos que son manuales, de modo tal que hay que encender y apagar las bombas, lo que requiere recursos humanos afectados a esa tarea. “Nos cuesta mucho mantener la presión, esto cambiará con las nuevas bombas”, aseguró Airasca.
El agua del tanque no está en contacto con el cemento, ya que el hongo tiene un revestimiento interno de fibra de vidrio y resina. “Es como una enorme pileta interna”, explicó el directivo. Lo que ocurre es que la grieta fue tan grande que terminó averiando también la malla, lo que dejó fluir una enorme cantidad de agua. Las imágenes, impactantes, se viralizaron y circularon por toda la región.
Por último, Airasca deslizó que la provincia “estará presente en este proceso, porque teníamos en curso muchas otras inversiones importantes en una localidad de 15 mil habitantes. Podemos producir agua igual, pero da más trabajo. Igualmente, el servicio de agua potable está asegurado”, remató.