No creas todo lo que ves en Facebook: el origen del Black Friday no se relaciona con la esclavitud.
El denominado Black Friday es aquel día donde muchos comercios lanzan ofertas para deleitar a compradores. Se realiza todos los años en Estados Unidos, una jornada después del Día de Acción de Gracias. No obstante poco sabemos hoy en día respecto a su origen.
En los últimos días fue publicada en Facebook una imagen que indicaba que este día estaba relacionado con la esclavitud en Norteamérica. Lo que resulta ser falso.
En la descripción aparecía lo siguiente: “El Viernes Negro se deriva se la esclavitud. Fue el día después de Acción de Gracias, cuando los comerciantes de esclavos los vendían rebajados para la temporada de invierno. De ahí el nombre ‘Black Friday”.
Lo cierto es que esta información no tiene nada que ver con la realidad, ya que este día tiene relación con algo netamente económico y asociado con la sociedad de Estados Unidos.
Según History Channel, existen tres teorías respecto a este día, las cuales hacen alusión a periodos difíciles de la banca estadounidense o jornadas en las que los ciudadanos realizaban gran cantidad de compras anteriores a Navidad.
La primera historia que se asoció al Black Friday data del año 1869, cuando un 24 de noviembre dos financieros de la bolsa de Wall Street no consiguieron utilidades y el mercado entró en bancarrota.
Esto hizo que muchas personas tuvieran que salir a las calles a comprar productos de primera necesidad por miedo a la escasez, lo que hizo que los supermercados se llenaran.
Otra teoría sostiene que , tras un año de pérdidas, empresarios estadounidenses dieron el día libre a sus trabajadores luego de Acción de Gracias.
Este viernes fue aprovechado por las familias para realizar compras, lo que trajo como consecuencia que las ventas de las tiendas pasaran de números rojos (pérdidas) a negros (ganancias).
Otra historia relaciona “Viernes Negro” con un concepto que utilizaron policías de Filadelfia para hacer alusión a un día en que los ciudadanos se lanzaron a la calle a comprar y provocaron caos.
Esta situación generó congestión vehicular que se extendió por todo el día. Lo cierto es que esta tercera idea es la menos aceptada.
Por lo pronto, el llamado es a no creer a primera vista todo lo que se publica en Internet, teniendo claro que hay que conocer las fuentes de los datos emitidos y corroborarlos con suma precisión.